Las esencias del buen comer y beber

Vinos, mostos y ventas

¡Ay, las ventas! Esos refugios secretos de carretera secundaria, en las que parece haberse detenido el tiempo. Acogedoras, dispuestas a ofrecer un rato de asueto, charla, alimento y bebida a peones del volante y el campo. Paradas obligatorias en viajes largos para estirar las piernas y reponer energías antes de continuar el camino. ¡Ay, las ventas! Hay una sensación de triunfo inexplicable cuando, de pura casualidad, se descubre una venta con encanto con todos los requisitos para serlo: decoración escasa y rústica, comida casera, platos abundantes, productos locales de temporada, ambiente familiar y buen precio.

En la provincia de Cádiz quedan muchísimas de esas. En esta ocasión, te animamos a que hagas las maletas con ropa para cinco días y te vengas con nosotros a conocer la esencia del buen comer y buen beber en Cádiz. Puedes hacer esta escapada en cualquier fecha del año, aunque para disfrutarla en todo su esplendor, finales de otoño e invierno es la época ideal. ¿Por qué? Ya lo verás. O mejor dicho, lo saborearás.

La tierra de los mostos

Nuestro viaje comienza en Trebujena, un pequeño municipio situado en el bajo Guadalquivir, a caballo entre la campiña jerezana y el parque natural de Doñana. Su gente presume -y con razón- de que los paisajes de sus marismas enamoraron al mismísimo Steven Spielberg, que eligió la localidad para rodar algunas escenas de la película 'El imperio del sol'.

Seguro que te lo mencionan durante la visita que haremos hoy. También te explicarán que de Trebujena salen los mejores mostos de la provincia. En Cádiz, el mosto es el primer vino, un vino muy joven, el “vino salvaje” lo llaman. Salvo casos puntuales, solo se sirve en temporada (más o menos, de octubre a febrero). En algunos sitios, mosto también es sinónimo de nuestras queridas ventas. En Trebujena, a los mostos los llaman tasca... En fin, todo un universo del que nos hablará nuestra guía de Ca'Moña, una empresa de productos locales y turismo activo. Hemos reservado un recorrido personalizado por su 'ruta del mosto'. Nos llevarán por el centro histórico de Trebujena, veremos el castillo de Los Guzmanes, cataremos mostos de su tienda y la Tasca Museo y almorzaremos en la Tasca Juan de La Vara. Ca'Moña suele trabajar con grupos, pero también atiende peticiones individuales. (Reserva en el: 665 102 983).

Queremos ver con nuestros ojos la belleza de la puesta de sol en las marismas de Trebujena, así que por la tarde, después de comprar unos cuantos recuerdos, haremos la mitad del recorrido del sendero por las salinas y marismas. Es decir, llegaremos hasta la carretera del Práctico y avanzaremos hasta la orilla del río. Por cierto, no te vayas de Trebujena sin probar su plato típico: garbanzos como conejo.

Para pasar la noche, reserva en Hostal Concha (956 395 221). Superacogedor y con un trato supercercano.

La tierra de la manzanilla

Desayuna fuerte con un buen pan campero en el restaurante del mismo hostal Concha y tira para la vecina Sanlúcar de Barrameda. La ciudad merece una visita por multitud de motivos y entre otros, por su manzanilla con denominación de origen. La manzanilla de Sanlúcar es un tipo de vino seco que sólo se hace aquí. Hemos quedado en el centro de visitantes de Herederos Argüeso para realizar la cata 'Del mosto a la manzanilla'. La experiencia cuesta unos 20 euros e incluye visita a sus históricas bodegas -algunos de los edificios son del S.XVI- (reserva en 627 674 331)

Seguiremos nuestra particular ruta del mosto caminando por el Barrio Alto. Pasemos por la Iglesia de Santo Domingo (S. XVI), el mercado de abastos, Las Covachas (S. XV), el Palacio Municipal (S. XIX)... Nuestro destino es la taberna La Herrería, un pintoresco local en el que podremos degustar el mosto de temporada. El Rincón del Abuelo, la venta Millán, Los Aparceros son otras opciones. En Sanlúcar, el mosto se suele acompañar de ajo caliente, guisos y pescaíto frito. Más sitios para comer, aquí.

La tierra del moscatel

Por la tarde, iremos a Chipiona. capital del moscatel, así que haremos una visita guiada con degustación por el museo del Moscatel de la Cooperativa Católica Agrícola . Hay más experiencias posibles (mínimo, dos personas). Abre solo fines de semana. En verano, abre todos los días en horario de mañana y tarde. (información y reservas en el 956 371 804). En temporada, venden mosto a granel.

En la ruta del moscatel por Chipiona, es de obligado cumplimiento pasar por el despacho de las bodegas José Mellado Martín. El cream con moscatel y el vinagre de moscatel son algunos de sus productos más valorados. Inexcusable también la visita a  las bodegas César Florido. El moscatel con pasas es su vino estrella.

Para cenar, en la venta Aurelio podremos degustar productos locales de temporada. Reserva en el 956 389 473. Presta atención a la agenda de actividades del municipio, ya que suelen organizar rutas gastronómicas y puede servirte para encontrar más pistas sobre qué hacer allí. La del 'mosto y la galera' es en enero.

¿Buscas dónde pasar la noche? Aquí hay propuestas.

La tierra del vino y la sal

Ponemos rumbo hacia la comarca de la Janda, pero antes paramos en Chiclana de la Frontera, un pequeño paraíso a orillas del Atlántico, donde se elaboran vinos de excelente calidad. Tiene que ver con la influencia del mar, el viento, la situación geográfica y unos cuantas causas más que descubriremos en el centro de interpretación del Vino y la Sal. Está situado en una antigua bodega, abre en horario de mañana y tarde y la entrada es gratuita.

Como es por la mañana, vamos a entrar en el mercado de abastos, justo delante del centro de interpretación. En la plaza, como aquí lo llaman, viendo los productos que venden, podrás hacerte una idea de la rica gastronomía de esta ciudad. Los chicharrones de Chiclana -crujientes trozos de carne- son superfamosos. Seguro que algún puesto los vende. Y si no encuentras, los pides luego en el tapeo. Otros embutidos de producción local (butifarras, morcillas, chorizo, carne mechada, mantecas...), pescados de estero, atún rojo, sal marina artesanal, entre otros productos, también tienen mucho renombre en la zona.

Además, en Chiclana hay varias bodegas por las que es recomendable pasarse y llevarse lo mejor de cada una.

Los balcones de la Janda y la Bahía

Para almorzar, hemos hecho reserva en la terraza junto al río de la venta El Toro, en Vejer de La Frontera 956 451 407. El local es muy típico, tradicional, familiar... todo lo deseable en una venta. Cocina casera y tradicional. Nos encanta su gazpacho caliente (hay que pedirlo con la reserva). En Vejer también es muy recomendable la venta Los Naveros. Hay que reservar en el 956 448 059. Son muy conocidos por sus platos con carne de caza.

Otra buena opción es El Soldao, en Medina Sidonia  956 417 119 . Nos pirramos por probar sus famosos arroces. Sólo abren en horario desde el desayuno y la cena. Tienen también habitaciones, en un pequeño hotelito.  

Según nos hayamos decantado por las ventas de Vejer o Medina, podremos pasar la tarde paseando por los conjuntos históricos de una o de otra. Ninguno de los dos te decepcionará y en ambos encontrarás la esencia de cada pueblo. Por su situación geográfica, en altos cerros, a Medina la conocen como el balcón de Bahía de Cádiz y a Vejer como el balcón de la Janda. Asomarse por cualquiera de ellos bien merece la pena. Buena opción son los establecimientos de Tugasa en Vejer y Medina. Pero hay más y para todos los gustos. Alojamientos en Vejer  y en Medina.

La tierra del Sherry

Hacer un viaje sobre vinos, ventas y mostos y no pasar por Jerez de la Frontera sería un auténtico sacrilegio, así que hoy enfilamos hacia la reina de las viñas. Casi todas las grandes bodegas ofrecen visitas guiadas por las instalaciones, e incluso experiencias que combinan las tradiciones del vino, flamenco, caballos y gastronomía jerezanas.

Por ofrecer una pincelada variada: Una primera aproximación a la materia podemos hacerla en el museo del Jerez que hay en las bodegas Dios Baco (S. XIX). Puedes reservar una visita guiada en el 678 682 154. En las de Díez Mérito (S. XVIII), además de la visita a una de las bodegas más antiguas de Jerez, mola un taller de cocina que incluye visita al mercado, y almuerzo en el restaurante La Carboná (reserva en el 660 233 438). En las bodegas Álvaro Domecq, es posible combinar la visita a las bodegas con otras experiencias, como la visita a la ganadería de toros bravos Torrestrella (hay que reservar con un mínimo de 48 horas de antelación en el 616 486 400). En bodegas Fundador ofrecen degustaciones de hasta diez de sus mejores sherries y brandies. Métele las tapitas, por favor (información y reservas  669 096 991).  Más bodegas.

Casi como bodegas, en Jerez, hay buenas ventas, mostos y tabancos debajo de las piedras, así que recomendar alguna es tarea complicada. El tabanco San Pablo siempre es un acierto, y como está en el barrio más flamenco del mundo, San Miguel (con permiso del barrio de Santiago), por la tarde podemos echarnos un baile en cualquiera de las peñas y tablaos flamencos de por allí.

Otro mostos agradables son el asador mosto Santa Teresa, Candelero y Añina (estos últimos sólo en temporada de mostos)

La tierra de Palomino y el mosto rojo

El último día de viaje lo echaremos por la Sierra de Cádiz. Prado del Rey tiene gran tradición en la elaboración y consumo de mostos. En la visita a las bodegas Rivero, la más antigua de la Sierra de Cádiz, nos explicarán el auténtico origen de los vinos Pajarete (sí, acertaste, Prado del Rey es su cuna). Comparada con las que hiciste ayer en Jerez, esta bodega te parecerá diminuta. Ese es justo su encanto, el de las empresas familiares, que siguen trabajando de forma artesanal. La visita y cata completa incluye degustación de cinco de sus vinos de la zona de Pajarete, quesos y chacinas de la zona. Hay que reservar en el 956 724 320. El mínimo para la visita es de seis personas, pero si somos menos, nos atienden también.

Los tintos ecológicos de las bodegas Hermanos Holgado también merecen incorporarse a tu bolsa de souvenirs. Se venden en la tienda de Quesos Pajarete, en Villamartín, donde, además de sus premiados quesos encontraremos otros productos gourmet, desde aceite hasta aperitivos.

Para almorzar hemos reservado en la venta Rosario. Aquí sirven mosto todo el año y sirven comida casera. El pollo en salsa es su especialidad.

La tarde la echaremos en Ubrique. Pasearemos por el pueblo y conoceremos su conjunto monumental. Visitaremos el museo de la Piel, para adentrarnos en la historia de la marroquinería de Ubrique y nos llevaremos algún recuerdo de su centro comercial abierto. No obstante, nuestra ruta por los mostos y ventas nos ha traído hasta aquí porque hacen un tipo de mosto de color rojo, tradicional en la zona y que se está tratando de recuperar. Lo sirven de su propia cosecha en la venta El Rubi (reservas 660 412 143). Si necesitas propuestas para echar la noche, aquí.     

Ni que decirse tiene que este viaje sólo muestra una ínfima parte de las ventas, mostos y tabancos de la provincia de Cádiz. Lo hemos hecho con toda la intención del mundo. Seguro que estos cinco días se te han pasado volando. Sí, lo sabemos. Pronto te veremos de nuevo. Y aquí estaremos.

ITINERARIO Y RECORRIDO